Procrastinar de vez en cuando no está mal, hay ciertas actividades que debemos hacer pero que por diversas razones posponemos, ya sea porque nos resultan aburridas, no son de nuestro agrado o simplemente no son de gran importancia.
Sin embargo, hay ciertas situaciones en donde la actividad en cuestión es muy importante, ya sea un proyecto del trabajo, la entrega final para pasar la materia, o incluso los avances de tesis. Es en estas ocasiones en donde se pueden generar sentimientos de preocupación, desesperación e incluso ansiedad porque, aunque sabes que deberías de comenzar y poner manos a la obra para por fin terminar con la tarea, simplemente prefieres arreglar tu cuarto, revisar tus redes sociales, lavar los platos o lo que sea que encuentres para seguir retrasando esta actividad tan importante.
Dado que esto es algo que la mayoría de las personas han enfrentado en su vida, en este artículo te platicamos algunas estrategias para dejar de procrastinar de una vez por todas, y poner fin a tu preocupación.
¿QUÉ ES LA PROCRASTINACIÓN?
Procrastinar es el acto de retrasar o posponer una tarea o un conjunto de tareas. Desde el punto de vida de la psicología, es un comportamiento de evitación. Es evitar algo aversivo al ocupar tus pensamientos en algo que preferirías hacer y que está disponible ahora mismo, sin tener en cuenta el futuro. [1]
Puede verse como un conflicto entre lo que quieres hacer ahora y lo que deberías hacer en el futuro. En resumen, es un problema de autorregulación.
¿POR QUÉ PROCRASTINAMOS?
Una investigación desde la psicología del comportamiento ha revelado un fenómeno llamado “inconsistencia temporal”, que ayuda a explicar por qué procrastinamos. La inconsistencia temporal se refiere a la tendencia del cerebro humano a valorar más las recompensas inmediatas que las recompensas futuras. [1]
Entonces cuando te propones aprender a tocar un instrumento, estudiar para tu examen final o terminar tu proyecto de titulación, estás haciendo planes a futuro. Estás visualizando cómo quieres que sea tu vida en el futuro y las recompensas que obtendrás. Pero a pesar de que un día puedas sentir mucha motivación para comenzar a realizar estos propósitos, a tu cerebro le es difícil concentrarse en esas recompensas a largo plazo porque prefiere la gratificación instantánea.
ACCIONES PARA DEJAR DE PROCRASTINAR
A continuación te dejamos algunos consejos que pueden ayudarte a dejar de procrastinar:
BUSCA MOTIVACIÓN
Si el problema principal es la falta de motivación, pregúntate qué te hace sentir mejor, o con menos estrés, ¿entretenerte con alguna actividad trivial o finalmente terminar con esa tarea que has estado postergando?
Si la respuesta es la última opción, entonces oblígate a comenzar. Intenta concentrarte por lo menos cinco minutos. Esto engañará a su cerebro para que se adapte al nuevo entorno y, por lo tanto, le dará motivación para continuar con la actividad.
ESTABLECE METAS SIMPLES Y ALCANZABLES
Parte de la razón por la que postergamos las cosas es porque la tarea que tenemos entre manos parece demasiado abrumadora. Es mucho más fácil comenzar un proyecto cuando se establecen metas simples y alcanzables en lugar de un plan muy grande y confuso.
CREA UN CRONOGRAMA
Después de establecer sus objetivos, crea una línea de tiempo para completarlos. Por ejemplo, planea un cronograma de estudio si sabes que tienes un examen próximo, (“El martes estudiaré el capítulo cinco y el miércoles estudiaré el capítulo seis”) o podría ser el plan para un ensayo o informe que tienes que escribir ( “El sábado comenzaré la búsqueda de información y el lunes redactaré la introducción”). Dividir una tarea en pequeños fragmentos a lo largo del tiempo la hace mucho más manejable.
DESHAZTE DE LAS DISTRACCIONES
Es importante deshacerse de todas las posibles interrupciones antes de comenzar a trabajar, para que no te distraigas innecesariamente a la mitad de tu tarea. Si tiendes a pasar demasiado tiempo en Tiktok o Instagram cuando deberías estar estudiando, o trabajando apaga el teléfono ( completamente apagado) o escóndelo. Las distracciones también pueden ser fuentes externas, para esto intenta escuchar música. También puedes intentar cambiar de entorno, puedes ir a la biblioteca o a la cafetería local, donde puedes aclarar tu mente y enfocarte sin distracciones.
DESCANSA UN POCO
Toma un descanso de tu trabajo de vez en cuando. Puede ser de alrededor de 10 a 15 minutos. Escucha música, sal a caminar, cualquier cosa que te distraiga y te permita relajarte. Un estudio de la Universidad Estatal de Oregon muestra que tomarse un descanso puede aumentar la concentración, reducir el estrés y ayudarte a retener mejor la información. Pero después de este breve descanso, ¡Comienza ya!
RECOMPÉNSATE
¿Recuerdas que a tu cerebro le gustan las recompensas inmediatas? Recompensarse a sí mismo puede crear un incentivo para completar una tarea y ayudar a evitar la procrastinación. Después de estudiar para un examen o completar una tarea, considera la posibilidad de darte una recompensa. Podría ser tan simple como, “Una vez que termine esta tarea, puedo ver un episodio de mi serie favorita”.
Y por último, pero no menos importante, intenta reflexionar sobre las causas fundamentales de tu procrastinación, algunas pueden ser muy simples, tal vez la actividad que necesitas realizar no es de tu agrado, pero también pueden haber algunas más profundas como que no sepas cómo comenzar, piensas que no lo harás de forma correcta, etc. Al hacer este ejercicio podrás darte cuenta de qué es lo que realmente hace que pospongas estas tareas, y así evitarás que siga sucediendo. ¡Mucho éxito!
REFERENCIAS
[1] James Clear (s/f). Procrastination: A Scientific Guide on How to Stop Procrastinating [Artículo de blog]. Recuperado de: https://jamesclear.com/procrastination#1What%20is%20Procrastination?
Solving Procrastination (s/f). How to Stop Procrastinating: A Guide for People Who Want to Overcome Procrastination and Start Getting Things Done [Artículo de blog] Recuperado de: https://solvingprocrastination.com/