* Científica del CICY estudia cómo estas plantas pueden ayudar a generar planes
para mitigar efectos del cambio climático
Con la finalidad de generar indicadores que sirvan para monitorear y predecir los efectos del cambio climático en los ecosistemas, investigadora del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) estudió cómo las bromeliáceas epífitas pueden revelar el impacto de los cambios climáticos en la península de Yucatán, lo que en un mediano o largo plazo permitirá generar planes de mitigación ante estos efectos.
La doctora Casandra Reyes García, investigadora de la Unidad de Recursos Naturales del CICY y líder de este proyecto, dio a conocer que las plantas epífitas sirvieron como indicadores dadas sus características fisiológicas —son muy sensibles a los cambios de clima—. Cabe señalar que estas plantas viven en las ramas y los troncos de los árboles (los usan como soporte) y se alimentan de los aportes aéreos como la lluvia y el rocío.
Explicó que en este trabajo se establecieron cuadrantes permanentes para el estudio de estas plantas en manglar (Celestún), matorral de duna costera (San Benito), selva baja (Dzibilchaltún), mediana (Kiuic) y alta (Calakmul), a fin de tener en monitoreo diferentes ecosistemas donde hay una diversidad importante de plantas epífitas. “Hemos estudiado la relación de estas plantas y su entorno y cómo hacen para crecer y sobrevivir en ambientes cambiantes y estresantes”.
La doctora Reyes García indicó que con esta investigación se quiere comprobar que las epífitas son buenos indicadores de cambio climático, además, se tiene el interés de hacer grupos ecofisiológicos que permitan exportar esta metodología a otras regiones como Chiapas y Oaxaca, donde también hay gran diversidad de estas especies, y analizar los cambios en la vegetación como resultado del cambio climático.
Destacó la importancia de este trabajo en la península de Yucatán, pues dijo que es una región en la que se han hecho muchas proyecciones relacionadas con el impacto del cambio climático. También precisó que las plantas epífitas no son parásitas (como muchas veces se piensa), pues no se alimentan de la savia del árbol, más bien, lo utilizan como sostén.
Finalmente, habló de la importancia de las plantas epífitas, pues además de ser indicadores de cambio climático, son un componente vital para los ecosistemas, agregó
Comunicado