Los musgos son plantas, son briofitas que acompañan la Tierra hace millones de años. Las briofitas forman lindos tapices verdes en muchos ecosistemas, son como alfombras en los bosques que dan la sensación de un suelo aterciopelado. Pero los musgos son organismos de vital importancia para los científicos. Son comunmente organismos modelo para enteder la evolución de las plantas, y también son modelos útiles para estudiar la evolución de las interacciones que establecen las plantas con muchos otros organismos, entre ellos los hongos.

Por su parte, los hongos son organismos con célula eucariota muy famosos en México. Los mercados mexicanos y tradiciones de muchos pueblos tienen a los hongos como protagonistas. Quizás el más famoso es el huitlacoche, científicamente llamado Ustilago maydis. Las quesadillas de huitlacoche o las sopas de zetas son muy famosas en la geografía nacional. Son tradiciones prehispánicas que guardan con celo nuestros abuelos.

Pero los hongos también son organismos con una gran utilidad biotecnológica. De ellos podemos obtener muchos productos que resultan imprescindibles para nuestras vidas. Nos ayudan a obtener panes, vinos, quesos, entre otros alimentos. También, sus proteínas y enzimas son de gran valor industrial. Se utilizan con éxito en la industria cosmética, alimenticia, energética, entre otras muchas.

En el bosque, los hongos y los musgos pueden establecer una unión muy peculiar. Las briofitas pueden vivir en armonía, en una relación donde ambas partes ganen y no compitan. El estudio de estas interacciones en ecosistemas naturales ha sido pobremente abordado. Sin embargo, su utilidad evolutiva y de aplicación puede ser muy importante.

Actualmente, científicos de México y Uruguay investigamos los efectos benéficos de estas relaciones ecológicas. En un esfuerzo binacional, la Agencia Mexicana para el Desarrollo Internacional y el Desarrollo, junto a la Agencia Uruguaya para la Cooperación Intenacional, han decidido financiar un proyecto de investigación para el estudio de Physcomitrella patents y hongos benéficos promotores del crecimiento vegetal.

Los hongos promotores del crecimiento vegetal son de gran importancia porque estimulan mediante diversos mecanismos el crecimiento de plantas de interés económico como jitomate, maíz, frijol, patata y soya, entre otras. ¿Pero, qué importancia puede tener el estudio de la interacción entre musgos y hongos?

La minería es una de las industrias que en México y Sudamérica ha sido responsable de la destrucción de muchos ecosistemas. La minería ha desvastado miles de hectarias de suelo, también contribuye con la erosión y genera miles de toneladas de escombros o minerales de baja ley. Estos escombros contienen pequeñas cantidades de metales, pero no pueden ser explotados para su extracción.

Por tanto, es necesario desarrollar sistemas biológicos e interacciones entre varios organismos que puedan ser aprovechadas para la resaturación de suelos. En este contexto, el uso de hongos y musgos puede ser una alternativa muy atractiva. Los musgos son organismos que contribuyen a la formación del suelo. Los hongos pueden suministrarle compuestos que ayuden a su rápido crecimiento. Por ejemplo, fitohormonas, compuestos volátiles con impacto en el desarrollo vegetal y nutrientes. Los hongos pueden proveer de mayores cantidades de nutrientes a los musgos y de esta manera estimular su crecimiento. Por ejemplo, los hongos pueden solubilizar fósforo, un nutriente esencial para los musgos. También pueden captar hierro, magnesio, manganeso, entre otros, y de esta manera ayudar a los musgos en su captación. Pero también los musgos se benefician de la captación de agua a través de su relación con hongos.

Nuestro interés es la obtención de un sistema hongo-musgo de rápido crecimiento para la implementación de tecnologías de reastauración de suelos impactados por la minería. Actualmente estamos estudiando el efecto sobre musgos de una colección de hongos del género Trichoderma y de levaduras aisladas del volcán Popocatépetl en México.

 

Aspergillus sydowii-like: Un hongo halofílico con un crecimiento óptimo entre 0.5 a 1.0 M de NaCl.