Existen factores internos y externos que pueden afectar la continuidad de los negocios recién creados. Los factores externos no son controlables por el emprendedor y están relacionados con el entorno en el que se encuentra el negocio como la legislación laboral, la competitividad de sus proveedores, las políticas económicas, entre otros.
Los factores internos son los que pueden ser controlables por el emprendedor tal como los productos y servicios que ofrece, la estrategia comercial que utiliza, la cultura organizacional, por dar algunos ejemplos. En algunas investigaciones que estudian los factores de fracaso de los negocios se han identificado que los factores internos son los que de mayor forma afectan el desempeño de las empresas.
Los factores internos de un negocio son extensos pero para hacer más fácil su análisis se pueden reunir en seis grandes grupos: factores de gestión empresarial, factores financieros, factores de recursos humanos, factores de la organización, factores de mercado y factores operativos.
Para que un negocio pueda sobrevivir, el emprendedor tiene que llevar a cabo una gran variedad de acciones y poseer habilidades tales como llevar una adecuada administración, tener la capacidad para afrontar situaciones, tomar decisiones de manera correcta, desarrollar planes de acción, ser capaz de delegar, cuidar el nivel de endeudamiento, motivar al personal, entre otras.
Las habilidades que debe tener el emprendedor pueden ser aprendidas y desarrolladas y esto solamente lo conseguirá si tiene una actitud positiva y abierta para querer trabajar en estas competencias.
Se han realizado extensos estudios para identificar las habilidades de liderazgo empresarial que poseen los empresarios y empresas efectivas a nivel mundial siendo agrupadas en doce categorías generales.
Estas doce categorías son: gestión de los equipos de trabajo, gestión de las relaciones interpersonales, gestión del desarrollo de otros, gestión de la innovación, gestión del futuro, gestión de la mejora continua, gestión de competitividad, empuje a los empleados, gestión de servicio al cliente, gestión de culturización, gestión de los sistemas de control y gestión de coordinación de los recursos internos y externos.
El emprendedor debe identificar las habilidades que tiene que poseer o desarrollar para lograr la efectividad en su negocio y destacar en su sector empresarial, esta información la puede obtener por medio de una auto reflexión o pidiendo retroalimentación a sus colaboradores.
En la medida en que el emprendedor vaya desarrollando más habilidades de gestión empresarial la eficacia a su negocio irá creciendo y mayor será su probabilidad de éxito.
